Según un estudio estadounidense citado por Nature, la defensa inmunológica del cuerpo a los coronavirus estacionales se asociaron con una recuperación más rápida de los síntomas de quienes se infectaron con el SARS-CoV-2

En 1960 investigadores de Estados Unidos y Reino Unido aislaron dos virus que causaban resfriados comunes en los humanos y que bajo el microscopio electrónico lucían como coronas solares en su estructura molecular, lo que llevó a los investigadores en 1968 a acuñar el término coronavirus.

Los coronavirus son una extensa y antigua familia de virus, y el SARS-CoV-2 es la última incorporación. Específicamente en los humanos, hay siete tipos de coronavirus conocidos que pueden infectarnos, los denominados HCovs. Cuatro de ellos (HCoV-229E, HCoV NL63, HCoV-HKU1, y HCoV-OC43) suelen causar un resfriado común y pueden ser potencialmente más graves en personas inmunocomprometidas. Y los tres restantes tipos de coronavirus que han causado brotes de enfermedades graves en humanos son conocidos como el SARS-CoV (2002-2003), MERS-CoV (2012-actualidad) y ahora el SARS-CoV-2 2019, que se desconoce hasta cuándo estará presente.

Mientras la humanidad se enfrenta a la nueva pandemia y las cifras de muertos y contagios aumenta de a miles cada día por COVID-19, los investigadores se esfuerzan por descubrir la biología del último coronavirus, que ha desarrollado una serie de adaptaciones que lo hacen mucho más letal que los otros coronavirus que la humanidad había conocido hasta ahora.

La última exposición a los coronavirus estacionales (CoVs), que causan el frío común, no da lugar a la producción de anticuerpos que protejan contra el coronavirus nuevo SARS-CoV-2, según un estudio llevado por Scott Hensley, doctorado, profesor adjunto de la microbiología en la Facultad de Medicina de Perelman en la Universidad de Pensilvania, en Filadelfia, EEUU.

Pero hay una buena noticia: la infección reciente por virus relacionados con el SARS-CoV-2, pertenecientes a la familia de los descriptos coronavirus, podría reducir la duración de la enfermedad COVID-19, según un análisis de anticuerpos de 2.000 trabajadores de la salud en Estados Unidos.

“Los anticuerpos contra la proteína de pico SARS-CoV-2 pueden ser poderosas defensas contra COVID-19. Pero algunas personas tienen anticuerpos raros contra otros coronavirus que son anteriores a la pandemia y pueden unirse a proteínas del SARS-CoV-2”, afirmó Hensley, autor del estudio científico publicado en la revista MedRxiv y citado por Nature.

El equipo descubrió que las personas con los raros anticuerpos prepandémicos que actúan contra el SARS-CoV-2 no estaban protegidas de contraer el virus y desarrollar COVID-19. Pero las altas concentraciones de otros anticuerpos que habían sido provocados por dos betacoronavirus, una categoría que incluye el SARS-CoV-2, se asociaron con una recuperación más rápida de los síntomas del COVID-19.

Los autores especulan que esta protección es proporcionada por jugadores del sistema inmunológico llamados células T que se generaron en respuesta a una infección previa por betacoronavirus. Los resultados aún no han sido revisados por pares.

“Los anticuerpos raros de reacción cruzada contra el SARS-CoV-2 provocados por infecciones pasadas por coronavirus común (CCV) no se asociaron con protección; sin embargo, la duración de los síntomas después de las infecciones por SARS-CoV-2 se redujo significativamente en individuos con títulos más altos de anticuerpos contra el betacoronavirus común (βCoV)”, sostuvo Hensley.

Y agregó: “Dado que los títulos de anticuerpos disminuyen con el tiempo después de las infecciones por CCV, los individuos de nuestra cohorte con títulos de anticuerpos de βCoV más altos probablemente se infectaron recientemente con βCoV comunes en comparación con los individuos con títulos de anticuerpos más bajos. Por lo tanto, nuestros datos sugieren que las infecciones recientes por βCoV limitan potencialmente la gravedad de las infecciones por SARS-CoV-2 a través de mecanismos que no involucran anticuerpos de reacción cruzada”.

“Nuestros datos son consistentes con la hipótesis emergente de que las respuestas inmunitarias celulares provocadas por infecciones recientes por βCoV comunes reducen transitoriamente la gravedad de la enfermedad después de infecciones por SARS-CoV-2”, concluyó el experto.

#INFOBAE.

¿Cómo hacer para que los poros cumplan su función y estén en buen estado? ¿Cómo lograr que nuestro rostro no revele a simple vista poros muy abiertos? Estas interrogantes son más comunes de lo que piensas, muchas tenemos el mismo deseo: tener poros limpios y cerrar los poros abiertos del rostro. ¡Descubre cómo lograrlo!

Cuidados básicos para tener los poros limpios

Limpieza

Debes lavar, tonificar e hidratar tu piel en la mañana, antes de salir de tu casa, y en la noche, antes de acostarte a dormir. ¡Alerta! Este paso debes realizarlo a pesar de no haber utilizado maquillaje en todo el día, ya que el aire y la contaminación ensucian tu piel y la llenan de impurezas.

Exfoliación

Al aplicarte este tipo de productos remueves las células muertas. ¡Atención! Cuando vayas a escoger el exfoliante, ten en cuenta que esté diseñado para el rostro y no para el cuerpo. El tamaño de los granitos es diferente y necesitas uno delicado para tu rostro.

Mascarillas

Ayudan a retirar las impurezas ubicadas en las capas más profundas de la piel. Puedes comprar alguna o hacerla en casa.

Tiras adhesivas

Eliminan los puntos negros, los extraen dejando los poros limpios. Hoy en día es difícil conseguirlas en farmacias y automercados, pero si las encuentras, no dudes en adquirirlas porque dan resultados efectivos y rápidos.

¿Qué debe tener una crema?

– Retinol – Vitamina C – Ácido glicólico.

En cuanto al maquillaje

Los poros pueden convertirse en un gran dolor de cabeza cuando estamos frente al espejo maquillándonos. A continuación, una serie de recomendaciones en cuanto a las bases, que serán de gran utilidad para que tu piel luzca sana y bella:

– Utiliza bases líquidas y evita las que son en crema o muy espesas, pues harán que tus poros se te noten mucho más.

– No apliques la base con la mano; hazlo con un pincel o con una esponjita. Recuerda limpiarlos frecuentemente para evitar la acumulación de bacterias y, como consecuencia, la infección de tus poros.

– No te excedas. “En maquillaje más es menos”, asegura Rita Córdova, presidenta de Rita’s International Models Agency. El hecho de usar más base de la necesaria hará que luzcas mayor y con arrugas.

Experta Eme

Ana María Sáenz, dermatóloga, conversó con Eme y aclaró algunas dudas básicas en relación con los poros:

¿Qué son los poros?

Son el orificio a través del cual sale el vello. Son funcionales.

¿De qué depende el tamaño de los poros?

Depende directamente del tipo de piel. Por medio de los poros se expulsan las secreciones. A medida que la piel es más grasosa, los poros son más grandes, y viceversa.

¿Una vez abiertos los poros, no se vuelven a cerrar?

Eso depende directamente del tiempo que tienen abiertos, por ejemplo, cuando se abren en el rostro y no se tratan de cerrar rápidamente, el daño solar hace que se conviertan en una especie de cicatriz, de piel naranja.

¿Al pasar los años, cambian de tamaño y aspecto?

A medida que pasa el tiempo, el daño es peor.

¿Recomendaciones?

– Limpiar la piel dos o tres veces al día, dependiendo del tipo de piel.

– Utilizar protector solar.

– Consumir antioxidantes (vitamina C) para evitar cambios en la piel.

La pérdida del gusto y del olfato es uno de los síntomas del covid-19 y una de las secuelas más persistentes entre quienes padecieron la enfermedad.

Un estudio de la Academia Americana de Neurología informó que la pérdida de estos sentidos puede durar hasta cinco meses después de la infección.

La vida sin oler ni saborear los alimentos como antes del coronavirus puede ser difícil, especialmente si los sabores se distorsionan a amargos u otros desagradables.

La comida puede tener un sabor suave, salado, dulce o metálico. Aunque la mayoría de las veces estos cambios son a corto plazo pueden afectar tu apetito y cuánto comes.

El Departamento de Salud de Reino Unido publicó una serie de recomendaciones para mejorar el sabor de la comida durante la recuperación de covid-19 y algunos consejos para recuperar el gusto y el olfato. ¡Toma nota!

Mejora el sabor de tus comidas tras padecer covid-19

1) Prepara tus comidas favoritas para asegurarte de comer bien. Los sabores probablemente puedan cambiar, así que toma nota de todos los consejos.

2) Mantén tu boca limpia. Cepilla tus dientes por la mañana y por la noche, pero toma agua si sientes la boca seca o incómoda. Los expertos piden evitar los enjuagues bucales a base de alcohol.

3) Si los olores despedidos al cocinar te quitan el hambre opta por comer alimentos fríos o calentados en microondas durante un tiempo.

4) Si no tienes problemas al tragar la comida, los especialistas de Reino Unido recomiendan probar con diferentes sabores, texturas y temperaturas de los alimentos para ver cuál encuentras más comestible.

“Puede encontrar sabores suaves como pollo simple, pescado, tofu y arroz que pueden ser más fáciles de comer, especialmente si todavía siente náuseas o tiene el estómago revuelto. Los alimentos fríos o a temperatura ambiente también pueden ser más aceptables”, anotaron.

5) Consumir proteínas como carne, pescado y huevo es importante para la recuperación del covid-19, pero la comida que las contienen pueden tener un sabor amargo o metálico. Para mejorar su sabor puedes acompañarlos de adobos agridulces.

“Agregar sabores fuertes a la comida puede ayudar con el sabor, por ejemplo, hierbas y salsas como salsa de manzana, salsa de menta, salsa de arándanos, rábano picante, mostaza y encurtidos. Las especias también pueden mejorar el sabor”, recomienda NHS UK.

6) Chupar caramelos y mentas puede ayudarte a refrescar tu boca antes o después de comer.

7) Si los alimentos te saben a “metal”, cambia tus cubiertos de metal por unos de plástico o de vidrio.

8) “Los cambios en el sabor salado o amargo se pueden mejorar eligiendo variedades bajas en sal y agregando sabores dulces a los alimentos o bebidas, como edulcorantes, miel o azúcar”, agregan.