Tras el reporte de coronavirus de este 7 de marzo, Nicolás Maduro anunció que se «apretará la mano» para la próxima semana de radicalización (desde el lunes 8 hasta el domingo 14) perteneciente al cuestionado esquema «7+7».

Asimismo, Maduro llamó a las autoridades a desplegarse a tras finalizar la reunión con él, para así sean aplicadas medidas para controlar el incremento de casos, además del de la variante brasilera.

«50% de los casos activos en el país están en la región capital (…), mayor esfuerzo, mayor disciplina y mayor colaboración de la familia, de la comunidad y de las organizaciones del Poder Popular», dijo.

Tras esto, Maduro aseguró que firmó «todos los documentos con la OPS para que se liberarán 300 millones de dólares. Estamos esperando que se liberen los primeros 120 millones para comprar las vacunas».

Centenares de personas se concentran este domingo en los alrededores de la residencia presidencial en Paraguay para pedir por tercer día consecutivo la renuncia de Mario Abdo Benítez, criticado por su gestión de la pandemia y el colapso de un sistema sanitario carente de suministros y medicinas.

Los manifestantes, en gran parte jóvenes, se encuentran en una zona que es parte de las principales arterias del centro asunceño y en la que se encuentra el edificio de la Embajada de Estados Unidos.

El perímetro de la residencia está protegido por un fuerte dispositivo de la Policía Nacional.

En la concentración, que coincide con el primer año de la detección de casos de Covid en el país, se exhiben pancartas por la dimisión del presidente, del gobernante Partido Colorado, y se denuncian algunos de los escándalos de corrupción de su gabinete.

En otras se denuncia las carencias sanitarias y educativas del país y se critica al Gobierno por el uso del préstamo de 1.600 millones de dólares aprobado por el Congreso el pasado años para hacer frente a la pandemia, con subsidios y compra de medicamentos.

Otros participantes exigen la dimisión de todo el gabinete de Abdo Benítez como única manera de resolver los problemas históricos del país como el de la salud, cuya precariedad se ha acentuado con la pandemia, que ha causado unas 3.300 muertes en una población de siete millones de habitantes.

La manifestación sigue a las de los dos días anteriores, convocadas a través de las redes por ciudadanos y sin identificación partidaria, y en las que se exponía el hartazgo ante la carencia de suministros y las promesas del Gobierno de unas vacunas que solo han llegado a cuenta gotas y para el personal sanitario.

La marcha del sábado se desgajó en otra menor que se dirigió a la residencia presidencial y fue dispersada por la Policía Nacional.

En el curso de esa manifestación, Abdo Benítez emitió un mensaje televisivo grabado en el que anuncio del cambio de cuatro ministros en aras de la paz social y el diálogo, al tiempo que se comprometió a redoblar los esfuerzos para abastecer los hospitales en tiempo y forma.

Entre los ministros destituidos está el interino de Salud, Julio Borba, sustituto desde el viernes de Julio Mazzoleni, que renunció ante las protestas del sector de enfermería ante la crisis sanitaria.

Muchos manifestantes señalaron hoy que esos cambios no lograrán detener las movilizaciones, que está previsto que sigan los próximos días.

La semana próxima los principales partidos de la oposición mantendrán reuniones para hilar una propuesta de juicio político a Abdo Benítez en la Cámara de Diputados.EFE

Los suizos aprobaron hoy en referéndum, aunque por un mínimo margen, una ley que prohíbe que las mujeres utilicen en cualquier lugar público el velo integral o el burka, elementos de la vestimenta tradicional islámica.

La iniciativa presentada al pueblo fue denominada “Sí a la prohibición de esconder el rostro” y ha salido adelante con un 52 % de votos.